Miguel F. Castilla, fuego y pasión en constante evolución
Junto a Miguel F. Castilla, chef ejecutivo del restaurante Reina Sofía, uno nunca sabe si fue su pasión por la cocina la que encendió los fogones, o su constante evolución la que hace que nunca se apaguen.
Creativo, detallista, y exigente consigo mismo al máximo, sus platos podrían intimidar a cualquier constelación de estrellas de cartel. Quizá, porque tras la creación gastronómica, la persona que se muestra luce tanto como su obra y, seguramente, porque en su restaurante Reina Sofía (Almuñécar) la virtud creativa se sirve con la humildad de un maestro.
Fuego y pasión en evolución
Para este chef apasionado de los fogones no existen horas ni días que perder para continuar el camino marcado en su evolución profesional, un ejemplo de superación personal y crecimiento profesional en la vida.
Huiré del manido tópico de las personas «hechas a sí mismas»; pues como él mismo dice, reafirmando a Ortega y Gasset: «a todos nos hace la vida y quienes nos rodean». Esta sentencia lleva implícito su paso por la cocina del Hotel Meliá Sol ‘Los Fenicios’; de un pequeño restaurante en el paseo marítimo llamado «Castilla» -donde probé el mejor tiramisú del mundo-, de la cercanía de nuestro admirado Jacky «Cotobro» y de la influencia del producto mediterráneo de la Costa Tropical en su cocina, que este innovador cocinero sabe realzar con la genialidad de un artista.
Miguel F. Castilla concibe cada plato como un arte para los sentidos, en el que se requiere toda la disciplina y motivación posible. Pues si un cuadro lo degustamos con la vista y una sinfonía con el oído; la gastronomía, que pretende llegar a muchos más sentidos, exige de una capacidad de creación aún mayor. Igual que la cocina necesita del buen producto y una idea para transformarlo, el chef necesita de esa constancia en la formación que le permita seguir evolucionando hasta el concepto que persigue. En este sentido, sus pasos expresan un continuo crecimiento profesional; entendiendo cada uno de ellos desde la originalidad para satisfacer el paladar más exigente y nuestro fin más saludable.
Aun ejerciendo como chef ejecutivo, empresario, y organizador de eventos gastronómicos, consigue arañar al día las horas suficiente para cultivar el huerto que provee su restaurante y la familia que alimenta sus sueños. Miguel F. Castilla es pura pasión, la del cocinero hecho a fuego lento con la base de un gran equipo.